Loading..
Procesando... Espere por favor...

Producto añadido al carrito correctamente.



Regístrate y consigue un 10% de descuento para tu 1ª compra.

 
 
Envío gratuito *pedidos superiores a 25€ Devolución hasta 30 días Envíos 24h excepto joyas personalizadas

¿Cómo deben cuidarse nuestras joyas?

¿CÓMO DEBEN CUIDARSE NUESTRAS JOYAS?

Las joyas son piezas de valor y, en la gran mayoría de los casos, muy delicadas. Por lo que debemos tratarlas siempre con el máximo cuidado.

Para el cuidado de las joyas deben seguirse unos sencillos consejos:

  • Evite siempre el contacto de la joya con productos cosméticos o domésticos que puedan dañar su color.
  • Para limpiar sus joyas debe usar siempre agua tibia y jabón (con PH neutro), utilizando si lo desea un cepillo de cerdas suaves, secándolas posteriormente con una gamuza.
  • Es necesario comprobar con frecuencia que los cierres estén en buen estado.
  • Es recomendable chequear con cierta frecuencia el engaste de las piedras, para asegurarse de que están todas bien colocadas y evitar así que se caigan y se pierdan.
  • No deben exponerse las joyas a cambios de temperatura bruscos.
  • Para la correcta conservación de sus joyas, es preferible que las guarde siempre de manera individual, en sus estuches originales.
  • Si se utiliza un joyero, procure que las piezas estén siempre en compartimentos separados.
  • Evite que las cadenas queden cerradas y en plano para que no se formen nudos. 

Si tuviera cualquier duda acerca del estado de sus joyas, recomendamos que no las utilice hasta que hayan sido revisadas por un especialista.

En REGALANDA estaremos encantados de ayudarle siempre que lo necesite.

 

CUIDADO DE LAS JOYAS DE PLATA

Para el correcto cuidado de sus joyas de Plata de Ley le hacemos unas breves recomendaciones:

  • Recomendamos evitar siempre el contacto con productos abrasivos.
  • Cuanto menos se roce una joya, más larga será su vida.
  • Desde REGALANDA recomendamos guardar siempre las joyas de forma individual.
  • Las joyas de Plata de Ley deben limpiarse siempre con una gamuza.

 

CUIDADO DE LAS JOYAS DE ORO Y DIAMANTES

Aunque gracias a su máxima dureza, 10 según la escala de Mohs, el Diamante solo puede rallarse con otro Diamante, es necesario que cuidemos nuestras joyas de Diamantes de forma habitual, ya que el Diamante no deja de ser una piedra preciosa y delicada.

Recomendaciones para el cuidado de sus joyas de Oro de 18 Kts. y Diamantes:

  • Para limpiar sus joyas debe usar siempre agua tibia y jabón (con PH neutro), utilizando si lo desea un cepillo de cerdas suaves, secándolas posteriormente con una gamuza.
  • Un Diamante puede rallar fácilmente otro tipo de piedras y metales, por lo que recomendamos evitar el roce entre ellos.

 

CUIDADO DE LAS JOYAS CON PIEDRAS

Las piedras pueden verse deterioradas por el contacto con sustancias químicas como los ácidos, el alcohol, los perfumes, los detergentes, etc… También pueden verse alteradas por factores físicos como la temperatura.

Las gemas orgánicas, como las perlas, son más débiles que otras gemas ante ciertos agentes químicos, por lo que deben mantenerse siempre lejos de jabones, perfumes, cremas, detergentes... Este tipo de piedras preciosas también pueden deshidratarse, por lo que es recomendable evitar las fuentes de calor directas como por ejemplo, las luces y los radiadores.

 

CUIDADO DE LAS JOYAS EN VERANO

Las joyas necesitan mas cuidados en verano, cuando las condiciones a las que las exponemos no son las más recomendables. Para evitar su deterioro os damos algunos consejos:

 


En el baño


Tanto en invierno como en verano debemos retirar las joyas antes del baño, ya sea en el mar, en la piscina, o la ducha. 

Las joyas pueden alterarse por el salitre del mar, el cloro de las piscinas o los detergentes de jabones y geles de baño. 

Si, a pesar de ello, nos bañamos con las joyas, es conveniente enjuagarlas muy bien con agua corriente y secarlas con un paño suave.

En el caso de joyas con piel o cuero éste se deteriorará más rápidamente si lo mojamos, como explicamos en un apartado posterior artículo sobre los cuidados de las joyas con piel.

Si nuestra joya lleva piezas de madera o piedra teñida también sufrirán al mojarlas pudiendo alterarse el color.

Las joyas que llevan algún tipo de adhesivo, ya sea en terminales, nudos o para sujetar piedras o perlas, pueden ver cómo éste se estropea, con el riesgo de que perdamos los gema o la joya completa.

 

Al sol


Lo más conveniente es retirar las joyas para tomar el sol, si queremos llevarlas hay que quitarlas antes de ponernos la protección, para no llenarlas de cremas o aceites.

Si van a estar expuestas al sol, hay que recordar que las piezas metálicas alcanzan rápidamente altas temperaturas y, como cualquier metal, se dilatan pudiéndose caer las piedras de los engastes. Los adhesivos y cauchos también se deterioran con el sol y el calor. En ambos casos corremos el riesgo de perder las gemas o toda la joya.

El sudor también influye negativamente en las joyas afectando a metales que pueden ennegrecerse debido a la oxidación; también pueden afectar a los esmaltes y adhesivos, esto depende de las personas, pero es mejor no arriesgarse.

 

CUIDADO DE LAS JOYAS CON PIEL

Si nuestras joyas llevan piel o cuero lo primero que debemos saber es que no debemos mojarlas porque al ser un material poroso absorbe la humedad y ésta lo altera y lo daña, acabando por cuartearse y perder flexibilidad; además el agua y los demás líquidos pueden mancharla.

Si se mojan no las sequéis nunca con secadores ni otras fuentes de calor. Lo más adecuado es utilizar un paño seco o papel de celulosa tipo papel de cocina, eliminando el máximo de humedad,  y luego dejarlas secar al aire.

Uno de los cuidados más fáciles y que mejores resultados da es aplicar una crema grasa, tipo Nivea, u otra crema de manos, con una paño suave, evitando los excesos. Esta capa de crema mantendrá hidratada la piel, la nutrirá, la protegerá del agua aportándole algo de impermeabilidad, y le dará flexibilidad, evitando que se cuartee.

Por último es conveniente revisar los nudos y fijaciones pues la piel puede contraerse dejando holguras y facilitando que los adhesivos usados se deterioren.

 

CUIDADO DE LAS JOYAS CON PERLAS

Las perlas son unas gemas muy resistentes y duraderas pero requieren unos cuidados si queremos que mantengan su color y lustre para siempre.

Lo primero que debemos evitar es que se arañen por el roce con otras joyas de materiales más duros, como lo son los metales o las piedras preciosas o semipreciosas; para ello lo más práctico es guardarlas por separado en sus estuches originales que estarán recubiertos en su interior por terciopelo o seda o, si esto no es posible, guardarlas en bolsitas de un tejido suave.

También debemos evitar el ambiente excesivamente seco que las deshidrataría y los cambios bruscos de temperatura que podrían provocar resquebrajamientos, es por ello que no es aconsejable tomar el sol con perlas.

Otra de las causas de la pérdida de brillo, color y lustre de las perlas es la acción de agentes químicos como desodorantes, perfumes, lacas, maquillajes, lociones y el mismo sudor corporal. Para evitar que se vean afectadas por ellos se recomienda ponérselas después de habernos puesto el perfume, laca o maquillaje, y lavarlas muy bien después de usarlas.

Para limpiarlas podemos usar un trapito suave seco o húmedo,o lavarlas con agua (a ser posible destilada para evitar el contacto de la perla con el cloro o las sales),  con un poco de jabón neutro aplicado con los dedos o con un cepillo de cerdas muy suaves. Después hay que enjuagar muy bien con agua fría y secarlas con un tejido suave.

Si las perlas las tenemos engarzadas en un hilo es recomendable revisar su estado pues los nudos se suelen ir aflojando y el hilo se deteriora con el tiempo, pudiendo llegar a romperse. Si acudimos al joyero él podrá volver a engarzar nuestro collar quedando como nuevo.

Otras veces las perlas se sujetan con pernos de oro o plata, en este caso es bueno revisar los engarces para evitar perderlas.

Por último las perlas pueden ir pegadas. Los adhesivos que se usan en joyería son de alta resistencia y de alto rango de temperatura, pero también se pasan, sobre todo si mojamos repetidamente la joya o la sometemos a grandes cambios de temperatura.

 

CUIDADOS DEL RELOJ

Para ayudar a conservar los relojes en su estado óptimo recomendamos limpiarlos con cuidado con la ayuda de una gamuza. La caja del reloj y su brazalete, al estar en contacto constante con la piel, necesitan ser limpiadas de manera habitual y debemos hacerlo con cuidado usando una gamuza limpia y seca, teniendo especial cuidado con los relojes con acabado en oro amarillo y oro rosa.

Nuestras correas están fabricadas con cueros de excelente calidad, por ello la exposición frecuente con el agua puede dañarlas. Recomendamos limpiar las correas con una gamuza cada cierto tiempo, así como su hebilla y cierre.

Debemos evitar someter al reloj a temperaturas extremas (saunas y baños turcos) e intentar no golpearlo, especialmente por la parte de la corona y el cristal. En raras ocasiones la corona puede abrirse con el roce de algunas prendas u objetos (al quitarse los guantes, el abrigo, etc...) y es por ello que debemos tener cuidado y cerciorarnos siempre de que está cerrada ya que de lo contrario anula por completo la estanqueidad.

 

En REGALANDA  disponemos de Servicio de Atención al cliente donde gustosamente atenderemos cualquier consulta sobre el cuidado de sus joyas.